EX MINISTRO DE ALVEAR ACONSEJA HACER LAS PACES CON ESPAÑA. (22/04/1815)

NICOLÁS HERRERA  fue el Ministro de Gobierno y Relaciones Exteriores de CARLOS MARÍA DE ALVEAR mientras éste se desempeñaba como Director Supremo de las Provincias Unidas del Río de la Plata,  y fue quien redactó las famosas cartas que ALVEAR le dirigió a representantes del Reino de Gran Bretaña, solicitando el Protectorado inglés para estas Provincias Unidas (ver Alvear pide la protección de Gran Bretaña).

Ya  en el exilio, luego de la renuncia de ALVEAR en 1815, le escribió al nuevo Director Supremo, su amigo, el General JOSÉ RONDEAU, aconsejándole hacer las paces con España. Para ello le envió una carta diciéndole:

22 de agosto de 1815:
«Mi amado Pepe: mi favorecedor y apreciado amigo: Ya te dije en la última escrita en la fragata inglesa «Hopp», que a pesar de tus recomendaciones a mi favor, no me quedaba otro recurso contra el fanatismo y la perversidad de mis enemigos, que buscar asilo en un país extranjero…

Yo llegué a esta capital y quedé asombrado al ver la benignidad del ministro español y la franqueza del gobierno portugués. Todos los emigrados vivimos en tranquilidad y sosiego. Ahora que me hallo fuera de las agitaciones populares es cuando reflexiono y miro este asunto con los ojos de la razón y de la filosofía…

Considera cuál será mí angustia ¡Agitado el espíritu con tan tristes reflexiones!… ¡Y que no haya salvación para nuestra patria! y, ¿se perderá enteramente el fruto de nuestros trabajos? ¿no habrá remedio para tantos males? Si, amigo. Yo creo que hay un recurso y único en el conflicto de tan fatales circunstancias.

No te asombres de verlo escrito de mi mano, pues, aunque he sido republicano mientras creí que la América podía y debía defender su independencia, dejé de serlo desde que conocí la inutilidad de sus conatos… ¿No será más racional, más prudente y debido prevenir con una paz anticipada los estragos de una guerra inútil;  librar a los pueblos de una completa ruina, evitar mil trabajos a nuestras familias y amigos, ahorrar la sangre de nuestros compatriotas y sacar ventajas reales para la provincia y para los hombres que se han comprometido en la revolución? Yo pienso que no debe retardarse este arbitrio un solo momento…

La paz restablecerla entonces el sosiego público, cesarían las calamidades, volvería el orden, renacería el comercio y más adelante, con el transcurso de los siglos, y cuando el tiempo indique que la América ha llegado a la edad de la emancipación entonces los pueblos se constituirán en nación independiente por la marcha misma de la naturaleza.

Sí, amigo mío: No nos alucinemos, la América no puede gobernarse por sí misma: le falta edad y madurez y jamás estará tranquila mientras no tenga al frente personas que impongan a los pueblos por la majestad del trono…

Si es necesario que anticipemos la paz, no queda otro recurso que una conciliación con el rey. Conozco la oposición que hará la multitud ¡pero los pueblos siguen siempre en estas cosas el impulso de la fuerza armada!… Tú puedes capitular con Pezuela bajo condiciones honrosas y de justicia…

No trepides, Pepe, en un negocio en que ejecutan los mo­mentos, ni dudes del cumplimiento fiel de lo que se estipule, porque el rey y la nación tienen un interés po­sitivo en ganar el corazón de los ultramarinos con actos de generosidad y clemencia …

Tú serás general de la nación, todos los oficiales del ejército conservarán su rango, se respetarán las propiedades y empleos. Volverán las familias a sus hogares, sin que jamás se les pueda reconvenir por lo pasado y tal vez, el rey se preste  a lka libertad mercantil, que es lo que reparará muy pronto las calamidades que han sufrido las provincias  en la revolución.

Todo esto podemos podremos ganar si tu haces lo que dicta la razón y las circunstancias. He hablado con la franqueza de un amigo  y un hombre que ama la sólida felicidad del país en que nació. Adios mi querido Pepe. Que El te de el acierto  y a mi, ocasión de acreditar que soy tu más apasionado  q.t.m.b. Nicolás Herrera (ver Alvear pide la protección de Inglaterra)

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