MONEDAS Y POLÍTICAS CAMBIANTES (1840)

Monedas riojana
El 24 de setiembre de 1840 los representantes de las provincias de La Rioja, Salta, Catamarca y Tucumán, formalizaron la creación de la Coalición del Norte, desconociendo la autoridad del gobernador de Buenos Aires JUAN MANUEL DE ROSAS para ejercer la titularidad de las Relaciones Exteriores en nombre de todas y proclaman al gobernador riojano TOMÁS BRIZUELA, general en jefe de los ejércitos coligados.

Brizuela era el mismo jefe federal que en 1836 había Impuesto el busto de Rosas en las monedas riojanas (ver Botones, monedas y medallas).  Esta vez, decide retirar de las piezas que se acuñaban en la Casa de Moneda provincial, las leyendas laudatorias adoptadas en 1838. Se acuñan así, en ese turbulento año de 1840, dos tipos de monedas, federales las primeras, unitarias las últimas.

No era la primera vez que La Rioja caía en poder de los unitarios. En 1829, el general ARÁOZ DE LAMADRID, a consecuencia de su triunfo sobre FACUNDO QUIROGA, había ocupado la ciudad. Pero en aquella oportunidad no se pudo acu­ñar monedas porque los riojanos habían desmantelado la ceca y escondido las ma­quinarias, cuños e implementos necesarios para ello. Restablecida con gran trabajo la casa, las labraciones continuaron sin variar de tipo, que imitaba el de las monedas patrias de 1813 acuñadas en Potosí.

Pero en 1840, la situación era diferente. Los riojanos habían colocado en sus mone­das frases como “Eterno loor al restaurador Rosas”, mostrando una franca adhesión al gobernador porteño, e incluso, habían  grabado su busto en monedas que emitieron en 1836.

Por ello, los unitarios, no cambiaron  el tipo de las labraciones, que continuaban  llevando el escudo nacional con sol en el anverso y el cerro de Famatina con trofeos militares en el reverso, pero suprimieron el sentido político ina­ceptable de sus leyendas, retornando a la frase anterior, En Unión y Libertad”, de las primeras amonedaciones independientes.

Estas últimas emisiones riojanas terminaron en los primeros meses de 1841 cuando el jefe de los ejércitos federales, general JOSÉ FÉLIX ALDAO, desde Mendoza invade la provincia de La Rioja y ocupa la ciudad capital.

Billetes tucumanos
En la misma fecha en que ALDAO restablecía la influencia federal en La Rioja, en Tucumán se emitían los primeros y únicos billetes de la Coalición del Norte en un desesperado intento de obtener fondos para la lucha. Están fechados en abril y mayo de 1841 y se lanzan a la circulación a nombre del “Banco Hipotecario de las Provincias Ligadas del Norte”, respaldándose la emisión con bienes inmuebles.

Resultado de imagen para primer billete emitido en la provincia de tucumán

Con el propósito de vencer la resistencia que ofrecía la circulación de estos billetes, de fin eminentemente político, se estableció que, concluida la guerra, los posee­dores de este papel moneda recibirían un premio del diez por ciento sobre su valor facial.

Los ejemplares que han llegado a nuestros días son muy raros y sólo de Un peso y Un real, ignorándose si se emitieron otros valores. Están impresos en negro sobre papel de malísima calidad y de un solo lado. La Impresión es pobre y el diseño borroso, habiéndose colocado una leyenda (previendo la aparición de contrahechos) condenando a muerte a los falsificadores y a sus cómplices.

En cuanto a las monedas de La Rioja, se batieron piezas de oro de 8 escudos (una onza) que, si bien son raras, han llegado a nuestros días en mayor proporción que sus similares con leyendas federales. No ocurre lo mismo con las monedas de plata, a pesar de haberse acuñado ambos tipos en el valor de 8 reales (pesos). Lo reducido de la acuñación unitaria ha convertido a estas piezas en ejemplares de extrema ra­reza.

En 1841 se suspendieron las acuñaciones riojanas y en 1842, restablecida la ceca con influencia federal, se lanzarían a la circulación las primeras monedas con el busto de ROSAS. Las emisiones monetarias de las provincias coligadas (monedas riojanas y billetes tucumanos) han quedado como testimonio del fallido intento unitario de los años 1840- 1841, encabezado por LAVALLE.

Fuentes: Monedas unitarias riojanas en 1830”, Mariano Cohen, “Memorias” del Instituto de Numismática y Antigüedades, “Crónica Argentina, Ed. Codex, Buenos Aires, 1979;  La moneda circulante en el territorio argentino”, Héctor Carlos Janson, Buenos Aires, 2016; «Monedas de la República Argentina». Arnaldo J. Cunietti-Ferrando, Editado por el Centro Numismático Buenos Aires, 1971; Investigación personal ante comercios especializados; «La moneda argentina”. Emilio Hansen, Ed. Sopena, Barcelona, 1916.

 

 

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