LOS SIETE LOCOS (00/10/1929)

En octubre de 1929, ROBERTO ARLT publica su obra «Los siete locos», y con ella, avanza hacia un territorio mal explorado por la literatura argentina: el mundo de los marginados sociales.

En esos años, la literatura comienza a dejar de ser un campo exclusivo de las clases más altas y ROBERTO ARLT emprende el duro camino de la búsqueda hacia mundos nuevos.

En 1929 publica su obra «Los siete locos». No pretende ser didáctico. Ni explicar nada previamente formulado. Su obra es el producto directo de un convulsionado mundo interior. Algo que lo emparenta con el psicologismo meta- físico de la novela rusa a la manera de Dostoievsky.

La forma es renovadora, no por una conciencia de estilo, sino por un proceso instintivo. La obra de Arlt es un viaje tortuoso hecho a manotones y puñetazos. Un desfile de personajes marginados de las estructuras tradicionales. Todo en medio de un aire confuso.

Un Buenos Aires de arrabal y clase media sin contornos definidos, expresando una realidad inédita a través de sí mismo. En esto se diferencia de los escritores de Boedo: el drama social se vuelve metafísico. El camino es confuso y el país vive ese laberinto (ver Diferencias entre los grupos literarios Boedo y Florida).

Una cosmovisión gris y balbuceante. Paulatinamente languidecen algunos rótulos: «La pequeña París», le dicen a Buenos Aires. «El granero del mundo», llaman a la Argentina. La búsqueda de la nueva realidad en nuestra patria, comienza a partir de un hombre del mundo oscuro (hijo de un emigrante prusiano y del arrabal), donde la necesidad de buscar una identidad, es más angustiante.

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *