LOS CHAPEADOS CRIOLLOS

«Cabalgando sobre brioso caballo moro cubierto de plata desde la testera hasta la baticola —cuenta PASTOR S. OBLIGADO en “La gloria de Caseros»—, cabezadas, riendas, pretal, todo relumbrante como una platería moviente, avanzaba el General Urquiza, rebosando alegría y satisfacción al contemplar su misión cumplida”.

Él caudillo-estanciero-general que después de la batalla de Caseros, se presentaba victorioso en Buenos Aires, fue el argentino que más había hecho por el desarrollo de nuestros lujos ecuestres. Así como contrató al pintor uruguayo JUAN MANUEL BLANES para que decorara la capilla de su estancia, el señor de San José, había alojado en su casa, durante varios años, al platero y grabador siciliano PABLO CAÍALDI para que vistiera sus caballos.

«Hoy quedan en Entre Ríos —escribió después EDUARDO DE URQUIZA refiriéndose a los trabajos de CATALDI—  gran cantidad de mates, bombillas, espuelas, cabezadas, frenos y otros adornos varios en plata y oro, admirablemente cincelados… “

Semejante preocupación por la platería ecuestre no fue, por cierto, un capricho personal del general URQUIZA. Nos viene a los argentinos desde la vieja escuela de equitación de la “jineta”, nacida entre las belicosas tribus “zenetes” de las serranías del norte de África y adoptada con fervor por los españoles que la usaron para expulsar de la península a sus maestros moriscos.

A diferencia de la rígida equitación de la brida (originada en las blindadas caballerías feudales y desarrollada en aristocráticos picaderos italianos), la “jineta” permitió una relación más suelta entre el hombre y su montado, y acompañó al naciente espíritu democrático que MENÉNDEZ PIDAL señala en la guerra de la Reconquista: caballeros ya no fueron tanto los “Hijosdalgo» sino, sobre todo, quienes pudieran reunir un caballo, las armas y el coraje necesarios para combatir por su fe.De España a América, los aventureros andaluces y extremeños, ensancharon aquel espíritu democrático ampliando —como pocas veces había conocido el mundo—- el uso del caballo y el gusto por sus arreos. La silla de la “jineta” (1) (prácticamente, la montura vaquera andaluza actual) dio en el Nuevo Mundo un descendiente directo: la montura mexicana, recamada de plata con mayor frecuencia que su antecesora morisca.

No puede extrañar tampoco que. a pesar de las transformaciones sufridas, la vieja silla de la “jineta” sea reconocible todavía en el apero típico de la provincia argentina que más conservó la tradición hispánica: el recado salteño de aletas delanteras y peineta atrás.

En cuanto a las prendas de platería propiamente dichas, JUSTO P. SÁENZ (h) enumera tres pilchas de prosapia árabe que no podían dejar de verse en un pingo entrerriano o correntino bien ensillado: el “fiador”, de chapas eslabonadas, cadenillas e ingeniosos broches de plata, sin una gota de cuero, que como pura prenda de lujo se usó con la medialuna musulmana pendiente de la garganta del caballo en lugar de argolla.

El “pretal ahorcador”, con chapas de plata en forma de figuras femeninas, ángeles y cuernos de la abundancia aplicadas sobre planchas de charol o suela negra (anchas de hasta 25 centímetros como pretal berberisco). Y la baticola”, ricamente adornada con pasadores, bombas y medias bombas y hasta de pura trenza de plata, que se sigue usando —sobre todo— en Corrientes y en Andalucía (ver El recado del gaucho argentino).

A estas Influencias extranjeras en la platería gaucha, habría que agregar —para completar tan apretada síntesis— el influjo autóctono.

LUCIO V. MANSILLA y ESTANISLAO S. ZEBALLOS describen los bellos emprendados de los industriosos ranqueles; por su parte SÁENZ recuerda que la modesta portezuela de fierro del freno de “la jineta”, al convertirse en la lujosa medialuna articulada hoy infaltable en los desfiles tradicionalistas, se llamó por un tiempo “pampa”: la transformación se había producido por obra de los plateros araucanos (Fdo. Fernando Córdova)

(1) Montar a la jineta. Remitimos al lector a la excelente página WEB titulada “Raíces y sabiduría”. Si busca “montar a la jineta” y luego abre “Raíces y sabiduría”, encontrará toda la información referida a este modo de cabalgar y una gran cantidad de interesantes datos vinculados con el tema.

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