LAS PRIMERAS MONEDAS DE LA PATRIA (13/04/1813)

Las primeras monedas de las  Provincias Unidas del Río de la Plata fueron acuñadas, por ley de la Asamblea del 13 de abril de 1813 en Potosí, ciudad ocupada por el Ejército Auxiliar del Perú al mando de MANUEL BELGRANO. Se contaba para ello con una magnífica Casa de Moneda, fundada por los españoles en 1574 e instalada con los mayores adelantos técnicos de la época, cuyas emisiones de oro y plata llevaban el busto del rey Fernando VII y el emblema español.

Resultado de imagen para primera moneda argentina

La Asamblea los sustituyó por nuestro actual escudo nacional y un sol radiante en el reverso, haciéndose la emisión a nombre de las «Provincias del Río de la Plata» y estampándose además la leyenda «En Unión y Libertad». Los diseños de la nueva moneda fueron enviados desde Buenos Aires y grabados los cuños por el jefe de talla, don PEDRO BENAVÍDEZ, colaborando en la acuñación,  casi todos los empleados de la Casa de Moneda, en especial los de origen americano.  Se acuñaron así, monedas de oro de 8, 4, 2 y 1 escudos y de plata de 8, 4, 2, 1 y medio real, además de medallas conmemorativas de las victorias de Tucumán y Salta y otros premios militares.

La acuñación continuó hasta noviembre de 1813 en que las derrotas de Vilcapugio y Ayohúma obligaron a evacuar la Villa de Potosí, cuya población de ricos mineros era predominantemente realista. En la retirada, el propio BELGRANO había dispuesto volar el edificio de la Casa de Moneda para castigar la hostilidad de la población, quitando al mismo tiempo al enemigo una fuente principalísima de recursos. Ya se habían colocado barriles de pólvora en la sala de la fielatura y encendido las mechas que hubieran reducido a polvo el histórico edificio, cuando la oportuna intervención de algunos españoles, desactivó  los explosivos.

Retirado el ejército comandado por BELGRANO, emigraron también los funcionarios de la Casa de Moneda que, comprometidos con los patriotas, hubieran sido objeto de represalias. Cuando en 1814 se pensó instalar una Casa de moneda en Buenos Aires, estos empleados se trasladaron a esta ciudad trayendo las herramientas y cuños de aquellas primeras monedas patrias que habían ayudado a acuñar. El proyecto fracasó y ocupada nuevamente Potosí en 1815 por el general JOSÉ RONDEAU, se decidió  acuñar una nueva emisión de monedas, y como no se contaba con personal idóneo ni elementos para la amonedación, esos empleados que estaban en Buenos Aires emprendieron entonces viaje a esa ciudad, pero fueron detenidos en Córdoba y su gobernador se incautó de los cuños, interesado en establecer una ceca en esa provincia.

Nuevamente en Potosó
Por ello, la acuñación patria de 1815 en Potosí fue tardía, comenzó recién a partir del 30 de agosto, cuando se nombró a FRANCISCO JOSÉ DE MATOS, ensayador primero de la Casa de Moneda, Las piezas acuñadas a partir de entonces llevaron la Inicial F de su nombre. Más tarde se incorporó nuevo personal a la ceca, nombrándose a LEANDRO OZIO ensayador segundo. Se cambia entonces la denominación de las monedas, sustituyéndose la palabra “reales” por “soles” y pasando a ser F. L. las iniciales de los ensayadores. Estos funcionarios eran quienes garantizaban mediante esta inscripción, la exacta aleación del metal. Durante ese período, utilizando  para estas emisiones, el metal que  provenía íntegramente dee las minas que fueron confiscadas a los expulsados realistastes y se acuñaron únicamente monedas de plata por valor de 941.315 pesos, amonedación que dejó un beneficio de 130.000 pesos. Las acuñaciones continuaron después de la derrota de Sipe-Sipe, hasta el 14 de diciembre, fecha en que los patriotas debieron evacuar nuevamente la ciudad. Abandonado Potosí, los patriotas  no volvieron a ocupar la ciudad, cuya Casa de Moneda continuó acuñando piezas con el busto del rey de España hasta 1825.

Fuentes: Monedas unitarias riojanas en 1830”, Mariano Cohen, “Memorias” del Instituto de Numismática y Antigüedades, “Crónica Argentina, Ed. Codex, Buenos Aires, 1979;  La moneda circulante en el territorio argentino”, Héctor Carlos Janson, Buenos Aires, 2016; «Monedas de la República Argentina». Arnaldo J. Cunietti-Ferrando, Editado por el Centro Numismático Buenos Aires, 1971; Investigación personal ante comercios especializados; «La moneda argentina”. Emilio Hansen, Ed. Sopena, Barcelona, 1916.

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *