Autor: Horacio 10/12/2015 0 Comentarios

Las tropas realistas al mando de JOAQUÍN DE LA PEZUELA derrotan en Cochabamba, Bolivia, a los efectivos patriotas de JOSÉ RONDEAU en  la batalla de Sipe Sipe  y esta victoria le permite a España recuperar los territorios al norte de la Provincia de Salta y por ello el Alto Perú se separa de las Provincias Unidas del Río de la Plata.

Luego de la derrota sufrida en Venta y Media (20 de octubre de 1815), el general RONDEAU intentó dirigirse a Cochabamba, 120 kilómetros al oeste de allí, donde pensaba establecer una línea de defensa hasta que le llegaran los mil hombres de refuerzo que le traía el coronel DOMINGO FRENCH, mientras que PEZUELA, avanzó hacia Cochabamba, para impedir la entrada de las fuerzas patriotas hacia dicha ciudad.

RONDEAU al frente de 3.500 hombres de infantería y caballería y 9 piezas de artillería, detiene su marcha y sitúa a sus tropas en la pampa de Sipe Sipe adoptando un formación que le permitía impedir el avance de los realistas, por el único lugar que consideraba posible para ello. Los realistas en tanto, unos 5.100 hombres y 23 piezas de artillería, el 27 de noviembre comienzan su acercamiento, pero no lo hacen por el lugar previsto por RONDEAU, sino que descienden hacia la pampa, por la cuesta de Viluma, debiendo para ello superar grandes dificultades por lo abrupto del terreno, luego de los cual, realizando un imprevisto rodeo, obligan a que RONDEAU deba cambiar de frente, perdiendo así todas las ventajas que le ofrecía la posición adoptada.

Desde sus comienzos, la batalla fue favorable a los realistas y muy pronto el ejército patriota se desbandó, pudiendo alejarse del campo de batalla, gracias a las repetidas cargas de los Granaderos a Caballo comandados por ROJAS y NECOCHEA y de los Dragones encabezados por ARÁOZ DE LAMADRID. Los patriotas entre muertos, heridos y prisioneros tuvieron 1.000 bajas, perdieron toda su artillería y unos 1.500 fusiles, mientras que los realistas sufrieron solamente 32 muertes y 198 heridos. El Coronel JOSÉ MARÍA PAZ dirá luego en sus “Memorias”: “Sin duda fue debido al respeto que impuso nuestra caballería, la débil persecución que sufrió nuestro ejército».

Recién en Potosí, donde fueron llegando los dispersos, RONDEAU pudo reunir nuevamente sus fuerzas. Desde allí se dirigió a Humahuaca, donde se le incorporó el refuerzo que le traía el coronel FRENCH. El 7 de agosto de 1816, MANUEL BELGRANO retomó el mando del Ejército del Norte  en Trancas. Marchó luego hacia Tucumán y acampó en La Ciudadela.

Considerada como la peor derrota sufrida por el ejército argentino durante la guerra de la independencia; fue la tercera y última vez que los españoles pudieron repeler a las fuerzas patriotas que avanzaban sobre Bolivia.

La victoria realista, vino a corroborar también la teoría de San Martín de que la independencia no podría lograrse peleando a lo largo de la ruta real a Lima y abrió el camino para llevar a cabo su plan de cruzar los Andes y de atacar a Lima con una expedición organizada desde un puerto chileno; la batalla influyó en el deseo boliviano de Se­pararse de la Argentina;

Como consecuencia de la derrota en Sipe Sipe, se perdió para siempre el Alto Perú y las Provincias Unidas del Río de la Plata quedaron solas y aisladas, ya que PABLO MORILLO dominaba el territorio de la actual Colombia; Chile se encontraba totalmente bajo el control del ejército realista y en el Alto Perú, las fuerzas de la corona habían sido reforzados por importantes contingente que le fueron enviados desde la península (ver El Ejército del Norte. Tercera Campaña)..

El victorioso Pezuela se convirtió en el nuevo virrey del Perú; España festejó el triunfo como fin de la guerra de la independencia hispano­americana en Sudamérica; sin embargo, menos de ocho meses después la Argentina declaró su independencia y en febrero de 1817 él ejercitó de San Martín venció a las tropas españolas en la batalla de Chacabuco, con lo que aseguró la independencia de Chile (ver Batallas y combates. Guerra de la Independencia argentina).