19/09/1829

El Gobernador de Buenos Aires, general  JUAN JOSÉ VIAMONTE dispuso por decreto que los vecinos de la campaña, que quisieran establecerse en la nueva línea de frontera, en el arroyo Azul y en los campos fronterizos que pertenecían al estado, recibirían en propiedad “una suerte de estancia, de la extensión de media legua de frente y media legua de fondo”. Con esta medida, el gobierno acudía en auxilio de las numerosas familias que habían quedado en la miseria, víctimas de los ataques de los aborígenes en sus antigüas posesiones, más allá de la nueva frontera demarcada por el Gobierno.

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