EL COLEGIO DE LA UNIÓN DEL SUD (02/06/1817)

El 2 de junio de 1817 (1), el Director Supremo JUAN MARTÍN DE PUEYRREDÓN dictó un Decreto por el que se restablecía el extinguido Colegio de San Carlos, creándose el Colegio de la Unión del Sud.

Un año después (en julio de 1818), se procedía a su solemne inauguración, con 47 alumnos becados. Para sostener este establecimiento de enseñanza se dedicó el producto del ramo de herencias transversales y las donaciones que muchos vecinos hicieron para sumarse a este emprendimiento.

Fue su primer Rector el Presbítero doctor DOMINGO VICTORIO ACHEGA, acompañado como Vicedirector por el Presbítero JOSÉ MARÍA TERRERO y por el Doctor ANDRÉS FLORENCIO RAMÍREZ como Director de Estudios.

Imagen relacionada

El Colegio de la Unión del Sud comprendía un plan de estudios más amplio que el de San Carlos. Además de las clásicas clases de Teología, que estaban a cargo de SATURNINO PLANES, de Gramática Latina, a cargo de MARIANO GUERRA, JUAN NEPOMUCENO CAÑERO e IGNACIO FERRO, materias que hasta entonces no habían tenido cabida en la enseñanza fueron incluídas esta vez.

Entre ellas pueden señalarse los idiomas vivos (inglés, francés e italiano) que dictaba el Profesor multilingüe VICENTE VIRGIL También merece especial mención la de Filosofía, cuya cátedra, en 1819 fue provista por oposición a JUAN CRISÓSTOMO LAFINUR, quien desde ella, marcó el paso del escolasticismo a las nuevas doctrinas que entonces empezaban a difundirse y eran sostenidas por los principales filósofos de la época.

Abandonó de lleno las viejas teorías y se inspiró en las ideas más innovadoras y en los escritos de los pensadores que las preconizaban, como CONDILLAC, LOCKE, DESTUT DE TRACY, NEWTON, etc. Como se ha dicho con razón, “antes de él los profesores de filosofía vestían sotana, él, con el traje de simple particular y de hombre de mundo, secularizó el aula primero y en seguida los fundamentos de la enseñanza”.

La iniciativa porteña se agregó así a la concretada en la provincia de Mendoza donde, desde octubre del año anterior, comenzó a funcionar el Colegio de la Santísima Trinidad, un establecimiento de características similares a las del Colegio de la Unión del Sud que fuera fundado por iniciativa de JOAQUÍN DE SOSA Y LIMA, con el apyo del General SAN MARTÍN, mientras ejercía como Gobernador de Cuyo.

Ambas fundaciones respondían  a la necesidad de poner al día los estudios medios muy decaídos desde la revolución, pero constituyó también, en el caso de Buenos Aires, un primer paso hacia la concreción de una vieja aspiración: su propia universidad (1). Otras fuentes dicen que fue el 15 de junio de 1817.

Fuentes: “Etapas Históricas de la Educación Argentina”, de Jorge María Ramallo, Ed. Fundación Nuestra Historia, Buenos Aires, 2002 y «Cronista Mayor de Buenos Aires», Ed. Instituto de Estudios Históricos de la Ciudad de Buenos Aires)..

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *