Autor: Horacio 10/12/2015 0 Comentarios

El 8 de junio de 1895, el público de Buenos Aires disfrutó con las genialidades del famoso «transformista» FRÉGOLI . Hacia fines del siglo XIX, Buenos Aires se había convertido en una ciudad de gran atractivo para los artista europeos que se presentaban como mucho éxito en sus teatros.

Entre ellos llegó LEOPOLDO FRÉGOLI, un imitador y prestidigitador célebre, nacido en Roma en 1867, que se presentó en el antiguo Teatro San Martín, reinaugurado en 1892, después que un incendio destruyó al primero de ese nombre.

FRÉGOLI venía acompañado de una aureola de enorme popularidad y presentaba un espectáculo nunca visto en Buenos Aires. Habilísimo para transformar su aspecto en pocos minutos, podía modular la voz haciendo de barítono, bajo o soprano, logrando así, imitar a la perfección a los artistas de ambos sexos más conocidos de su época.

Se presentaba usando un sombrero flexible, que impuso entre los porteños, de tal manera, que durante años su apellido sirvió para designar a ciertos sombreros de hombre que estuvieron de moda entonces.

Para su actuación en Buenos Aires presentó un número en el que hacía de profesor de música, se sentaba al piano y repentinamente era sustituido por un muñeco. Sin que el público lo notara, escapaba por un agujero de la decoración y reaparecía en el papel de una alumna del profesor, vestido de mujer con una peluca y pañoleta.

La «alumna» se sentaba junto al muñeco y FRÉGOLI representaba un diálogo en el que alteraba las voces de los dos personajes y el público porteño lo aplaudía enloquecido.

FRÉGOLI realizó giras por todo el mundo y viajaba siempre acompañado de un secretario que tenía una joroba, al que consideraba como un hermano y su mascota de la buena suerte. Aunque ganó millones con sus presentaciones, dilapidó todos sus bienes y murió en la miseria en 1934.