6/9/1897

HIPÓLITO YRIGOYEN y LISANDRO DE LA TORRE protagonizaron un histórico duelo, provocado por una expresión que DE LA TORRE usó en su renuncia al Partido y que YRIGOYEN, consideró agraviante (ver ampliado en “Crónicas”).

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *