1852
BERNARDINO RIVADAVIA trajo desde París los planos de la iglesia de la Magdalena, inspirada en el Partenón de Grecia, para hacer con la Catedral de Buenos Aires algo parecido. El padre Saturnino Segurola compró una casa vecina al templo y la donó para ampliar el terreno que ésta ocuparía y los trabajos se iniciaron. El donante del piso de mármol, fue Juan Manuel de Rosas.