15/09/1821

Ante la inminente llegada del general español CANTERAC a la ciudad de Lima (Perú), el General JOSÉ DE SAN MARTÍN ordenó que toda la plata existente en la Casa de Moneda, acuñada o no acuñada, tanto del Gobierno como de los particulares, fuese transportada a los buques mercantes fondeados en Ancón: éstos eran la «Jerezana», la «Luisa» y la «Perla».

Al enterarse de esta circunstancia, argumentando que lo hacía para pagar los sueldos atrasados de su tripulación, el almirante COCHRANE decidió apropiarse de aquellos caudales, violando todos los respetos que imponía la jerarquía y desatendiéndose de toda conveniencia social y política: dispuso transbordarlos a bordo del «OHiggins».

El mismo día, el General SAN MARTÍN le dirigió una enérgica nota que le fue entregada en manos por su Ayudante de Campo, Coronel TOMÁS GUIDO, diciéndole haberse informado de que había extraído por la fuerza los tesoros depositados en distintos buques, y ordenándole que procediese a devolver  las sumas que les había quitado a los peruanos..

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *