Autor: Horacio 30/05/2023 1 Comentario

Desde el descubrimiento de América (Cristóbal Colón 12 de octubre de 1492), la corona española destacó para el gobierno de este inmenso territorio que el azar había puesto a su disposición, un sinnúmero de Instituciones y funcionarios, que debían velar, no solo por una eficiente administración de esas nuevas colonias que demandaban su atención, sino que también debían ocuparse en que los bienes allí generados, fueran derivados, sin menoscabos, a las arcas reales.

Fue así que a partir del envío de los Adelantados, como ojos y oídos del rey en América, diversas instituciones fueron establecidas para cumplir con los fines expresados (ver Las Instituciones Hispanoamericanas) y una infinidad de funcionarios llegaron como celosos guardianes de esas apetencias.

Los principales funcionarios que actuaban en los organismos administrativos de las colonias en Hispanoamérica, fueron:

Los Adelantados (21/05/1524)
Fueron cargos de orden militar que desempeñaron enviados del rey de España para que ocuparan en nombre de la Corona, las tierras descubiertas por CRISTÓBAL COLÓN y las administraran luego bajo la competencia y de acuerdo a las leyes hispánicas.

Los Gobernadores (1592-1778)
Cuando en el Río de la Plata se suprimieron los Adelantados, los Gobernadores continuaron al frente de las provincias de Buenos Aires, Tucumán, Paraguay y Cuyo; los de las tres primeras dependiendo del Virrey de Lima, mientras que el de Cuyo obedecía al Capitán General de Chile, hasta la Creación del Virreinato del Río de la Plata en 1776. En el siglo XVIII, en las colonias españolas del Río de la Plata, cada Virreinato, cada Capitanía general, se dividía en provincias a cuyo frente se hallaba un Gobernador dependiente del Virrey a quien seguían en jerarquía y que eran la máxima autoridad política y judicial en su jurisdicción y además fomentaba la economía y el desarrollo de su territorio, repartía tierras y solares y dirigía los Cabildos. Nombraba a los Alcaldes Mayores y Regidores (o Corregidores).

Los Oidores (1661)
Eran los funcionarios que integraban las Audiencias (Tribunales de justicia creados en 1661 y que fueron una de las instituciones más importantes de las colonias españolas) y su número dependía de la categoría de éstas. Los “Oidores” debían realizar giras o “visitaciones” cada tres años por su distrito. Indagar sobre la conducta de los Regidores y los Alcaldes, remediar la suerte de los indígenas, observar las condiciones económicas, sociales y religiosas imperantes en el territorio de la Audiencia

Los Virreyes (1776-1810)
El rey Felipe II quiso gobernar sus reinos indianos como lo hacía con los de Castilla y León y, temeroso de que la distancia menguara sus reales prestigios, puso al frente de los reinos de Méjico y Perú mandatarios con el título de Virreyes y más tarde, en 1776, hizo lo mismo cuando creó el del Río de la Plata.

Alcaldes Mayores (1778)
O Magistrados, eran la máxima categoría de los miembros de un Cabildo, del que formaban parte con los Regidores. Duraban dos años en el ejercicio del cargo. Representaban los intereses de la comunidad frente al gobierno real, por ejemplo, la insistencia a fin de lograr la independencia judicial de la lejana Audiencia de Charcas tuvo como consecuencia el temporario establecimiento de la Audiencia en Buenos Aires (1661-1671). Regulaban las artesanías e industrias urbanas y rurales e inclusive intervenían en disputas y juicios que afectaran a la comunidad. Los Alcaldes de Hermandad (policía) eran simplemente agregados y no parte esencial del Cabildo. Los alcaldes duraban dos años.

Los Corregidores
Durante la época colonial, en el Río de la Plata, los «Corregidores» eran funcionarios reales españoles encargados de la administración municipal y la supervisión de los asuntos judiciales. La zona de su responsabilidad recibía el nombre de «Corregimiento». Asignados a las principales ciudades, los «Corregidores» ocupaba el lugar del gobernador en las ciudades no capitales de un distrito así como también en las áreas donde se encontraban los pueblos indios, cumpliendo una función que proporcionó en realidad, muy poca contribución positiva a la vida colonial del Río de la Plata. Los Corregidores se caracterizaban por su avaricia, por la explotación que hacían de los habitantes y por sus arbitrarias acciones. En 1782 estos funcionarios fueron reemplazados por responsables intendentes, considerándose dicha acción como una de las más importantes reformas borbónicas de carácter político llevadas a cabo en el lugar.

Los Regidores (1778)
O “Concelajes”, formaban parte de los Cabildos en una jerarquía por debajo de los Alcaldes Mayores. En el Río de la Plata, generalmente eran seis, elegidos anualmente por el Cabildo

Los Alcaldes ordinarios
Que junto con el Mayordomo, el «Podatario» o Procurador general, el Alférez Real y el Alguacil Mayor,  completaba la nómina del personal que cumplía tareas en los Cabildos

Pero además de estos funcionarios que residían en el ámbito de sus responsabilidades, según fueran las necesidades, eran enviados a América, los Pesquiadores y los Visitadores.

Los Pesquisadores eran aquellos funcionarios que durante la colonización de Hispanoamérica eran enviados por la corona de España a sus colonias, con la misión de investigar el comportamiento de las autoridades que la representaban en estas tierras y la aplicación de las leyes en los territorios de Indias (ver Juicio de Residencia)..

Junto con los Visitadores eran los ojos y oídos de los monarcas españoles, para evitar que sus funcionarios, con su comportamiento atenten contra lo dispuesto en la «Ley de Indias», pero, por sobre todo, que cometan abusos contra la comunidad nativa y sus derechos (ver Las Instituciones españolas en Hispanoamérica).